Para determinadas gestiones ante organismos públicos y privados: gestiones ante organismos educativos, gestiones inmobiliarias, trámites migratorios, procesos judiciales, gestiones ante delegaciones y oficinas consulares, entre otras muchas otras.
Se recomienda que los documentos originales vayan acompañados de la apostilla de la Haya, apostilla que en su caso puede ser traducida igualmente por el traductor jurado.